lunes, 28 de diciembre de 2015

Soy un hijo sencillo de la tierra


Soy un hijo sencillo de la tierra
una rama seca de árbol
que ayuda al que camina.


Digo sed para tensar el paso.

He imaginado cosas que todos habéis visto:
felices lugares
objetos fascinantes
para hacer más fácil el otoño
sueños que merecen su certeza.
 

Me he cruzado en la senda que asciende
con personas diversas
me han sonreído y han dicho
una palabra que es una convención
en este país que celebra un genocidio.


Y al caer he visto
un cielo rápido
curvo o quebrado como un verso de Vallejo
leído a los quince años.


He caído, sí
como un pájaro cae
con el agua en la espalda
y el alimento a la espalda
amortiguando el daño.


Entero, pleno, al uso, pero
con hormigas en los tallos
y una tibia sensación de desvarío
alzo un cuerpo que quisiera más extenso
y llego
a la conclusión del poema
con palabras que vienen a decirme:


Subir y descender caminos
pedir consejo a los árboles más viejos
cotejar alturas, nombres, gentilicios
inventar juegos estúpidos, jugarlos
como si nos fuera en ello
las calificaciones
finales del curso.





lunes, 21 de diciembre de 2015

[La luz en nuestro espacio]


La luz en nuestro espacio
te converge. Me he enamorado
tantas veces de esta noción de ser
tan tuya gramatical e inexorable
buscadora de horizonte en lugares
abruptos para el abrazo.


Los años son aquí nuestros rehenes
torpes salmones en dirección equivocada.


La luz que se viene con tu vuelo
me despierta a sobresalto
miro al otro lado del deshielo:
tengo el boleto ganador
sobre la almohada.




martes, 15 de diciembre de 2015

La chica de la melena celeste


La chica de la melena celeste
brinca entre las mesas
con pasos líquidos
de pétalos y caída


suena Amy Winehouse muy lejos
de los sueños que olvidan su motivo
bajo los párpados cansados de la niña-nube


recordará los días
por su brillo áspero
el leve maquillaje
cortado en tiras
los tirantes
que cercan el hombro
y la caricia
aquella muestra ingenua
de futuros cercados
llamados al desbroce

la desobediencia aún
flores raras
que crecen en aceras
marchitas

y en el cierre
abisal de la jornada
una fuerza
crecida en lo remoto
que plantará flores nuevas
en futuros tan cercanos.





jueves, 10 de diciembre de 2015

Nada pasa



Nada pasa. Sólo
espero tu llegada
y no me llegan las ganas
para pintar la casa
de colores nuevos
vaciar la nevera de ruidos
o pasear las aspiradora
por los lugares comunes.
Pasa que los días
son rápidos y a veces
hasta intercambiables
y hay punzadas que
se atraviesan como ramas
lanzadas a la corriente.
Pasa que la noche aprieta
y te tiendes a mi lado
yo te veo crecer como mercurio
entre estas manos mías que te evocan
y le piden a nadie
una promesa de tiempo
para recuperarte.

lunes, 7 de diciembre de 2015

[para los blandos]


para los blandos
soñadores del vino
que se mecen y se aman
en hamacas abiertas al sol

para las dulces
amnésicas del odio
las vértices del día
comedoras voraces de esperanza
las que se enroscan sin preguntas
y se mojan en lluvia todos los veranos

para los seres 
que apenas casi son
una onda en mar
mamíferos imaginados
compañeros de espaldas comunes
inmunes a la derrota

para el tiempo que es hoy
sin nostalgias o neumonías

los ecos 
secos de los pasos

las huellas
calientes en la arena